Si eres de los que están cansados del ruido y del ajetreo de la ciudad, o simplemente del trabajo y el sin parar del día a día, en este post te presentamos tres paisajes naturales, que podrás visitar, organizando una escapada improvisada, gracias a los viajes a última hora de Expedia, para disfrutar de la naturaleza y relajarse, dejando a un lado, por unos días la rutina diaria y el estrés:
Playa de las catedrales (Lugo).
Muy cerca de Ribadeo, la bajamar nos va a dar un espectáculo fabuloso, nos descubrirá una de las playas más solemnes y hermosas de Galicia, de España y del mundo. Esta maravilla natural es el decorado soñado por cualquier fotógrafo.
Su nombre se debe a la curiosa forma de sus acantilados, alguno de ellos de más de 30 m de altura. Su curiosa forma ha sido esculpida en su roca oscura por el agua y el viento a lo largo de los años, dando su forma característica, asemejándose a bóvedas y arcos.
Una manera mágica de disfrutar de este paraíso natural es durante la bajada de la marea, paseando descalzo bajo las bóvedas, dejando que la brisa del mar nos acompañe.
El Naranjo de Bulnes (Asturias).
El Naranjo de Bulnes es la cima más conocida de los Picos de Europa y símbolos del alpinismo español, un pico con 2.519 me de altitud, llamado también Picu Urriellu.
Solo pueden hacer cumbre alpinistas experimentados. Aunque no puedas ascender, puedes llegar hasta su falda y disfrutar de su espectacular porte, maravillosas panorámicas desde el recorrido desde Sostres, y además, montar en el funicular de Bulnes, dos alternativas bellas de aquella zona.
Cerca de esta maravilla de la naturaleza encontraremos aldeas muy pequeñas como Tielve y Poncebos. Encontraras en ellas la magia de la Asturias mas autentica y genuina.
El Valle de Baztan (Navarra).
En el corazón de Navarra nos encontramos con un valle pirenaico que por cultura y tradición y su enorme belleza natural, es un lugar obligado de visita cuando visitamos esta comunidad.
Un lugar de paso del Camino de Santiago que tiene la mejor y mayor conservada mancha forestal de Navarra e incluso de la Península Ibérica entera, la Selva de Irati.
Pasear por este valle, cuna del Euskera, nos permitirá disfrutar de la tradición cultural vascuence gracias a unos alojamientos rurales bien cuidados, con una rica gastronomía local con sus alimentos estrella, las carnes a la brasa y el queso.
¿A qué son maravillosos? Solo tienes que salir de las grandes urbes y marchar camino de estos tres regalos de la naturaleza, que nos harán olvidarnos por unos días de las preocupaciones y de los problemas que acumulamos días tras día en nuestras estresantes ciudades.