En 2014, el gobierno de México impuso el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a bebidas azucaradas. Este impuesto graba los refrescos y las bebidas azucaradas con un $1 peso por litro, lo que equivale aproximadamente al 10% del precio de venta del producto. El consumo de refrescos es un gran problema de la sociedad actual, y en Mexico estaba llegando a ser un problema nacional. Por esta razón, el gobierno tomó una medida excepcional para frenar el constante aumento de su consumo, sobre todo entre los mas jóvenes.
El consumo de refrescos continuada a la larga pueden provocar adicción ya sea por la cantidad de azúcar, cafeína u otros químicos legales pero adictivos que poseen los refrescos. El efecto negativo de las bebidas azucaradas es real y científicamente demostrado.
A pesar de que la sociedad en general no creían que esta medida del gobierno fuera a frenar el consumo de refrescos, la realidad es que en 2014 se ha registrado un descenso de nada menos del 12% en refrescos y bebidas azucaradas en general. Curiosamente aumentó un 4% la venta de bebidas sin este impuesto como por ejemplo el agua natural embotellada, que también tiene su gran problemática.
La reducción se produjo de forma generalizada en todos los grupos socioeconómicos, pero mas acentuada en el estrato con menos recursos económicos, donde el descenso llegó hasta el 17%. Lógicamente las familias mas pobres se ven mas afectadas por este tipo de impuestos. Pero en este caso no hay mal que por bien no venga. A pesar de que los niveles de obesidad y diabetes son casi iguales en todos los niveles socioeconómicos, el impacto económico es mayor en quienes menos ingresos tienen.
Nuestra opinión al respecto es clara, si el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios ha logrado disminuir el consumo de refrescos y bebidas azucaradas en México, sería necesario mantenerlo, fortalecerlo y aumentarlo. Y no solo en México, el resto de gobiernos deberían tomar nota y empezar a tomar medidas similares para intentar combatir este problema.
Datos: Centro de Población de la Universidad de Carolina del Norte – Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).