
Investigadores de la Universidad Técnica de Múnich (TUM) desarrollaron un compuesto de litio, antimonio y escandio que mejora significativamente la conducción de iones de litio.
- Nuevo material: litio + antimonio + escandio.
- 30 % más conductividad iónica que cualquier otro.
- Mayor estabilidad térmica, no inflamable.
- Menor complejidad química, solo 3 elementos.
- Producción posible con métodos ya conocidos.
- Ideal para uso en electrodos de baterías sólidas.
- Descubrimiento con potencial de aplicación global.
Avance clave en materiales para baterías sólidas
Un equipo de investigadores de la Universidad Técnica de Múnich (TUM) ha desarrollado un nuevo conductor sólido a base de litio, antimonio y escandio, que ha logrado un récord mundial en conductividad iónica. Esta innovación representa un paso esencial hacia la comercialización de baterías más seguras, eficientes y sostenibles.
Qué tiene de especial este nuevo material
El material supera en más del 30 % la conductividad de cualquier otro compuesto conocido hasta ahora. El secreto radica en su estructura cristalina optimizada: al reemplazar parcialmente el litio con escandio, se generan vacantes en la red cristalina que facilitan el movimiento de los iones de litio. Esto permite que los iones se desplacen más rápidamente, lo que se traduce en un mejor rendimiento de la batería.
Validación rigurosa de los resultados
Dada la alta conductividad observada, el equipo colaboró con especialistas en electroquímica para confirmar los resultados. Las mediciones tuvieron que adaptarse debido a que el nuevo compuesto también conduce electricidad, lo cual lo convierte en un material doblemente funcional: transporta tanto iones como electrones.
Ventajas frente a materiales anteriores
- Menor complejidad química: solo requiere tres elementos frente a otros materiales que necesitan hasta seis.
- Mayor estabilidad térmica, reduciendo riesgos de sobrecalentamiento.
- No inflamable, eliminando el riesgo asociado a los electrolitos líquidos actuales.
- Compatible con procesos químicos industriales existentes, lo que facilita su escalabilidad.
Apertura de una nueva clase de materiales
Este avance no se limita a un solo compuesto. El principio descubierto es aplicable a otros sistemas, como los basados en litio-fósforo, lo que sugiere un potencial transformador en el desarrollo de baterías sólidas. Además, este nuevo enfoque permite explorar combinaciones más simples y eficientes, sin recurrir a compuestos complejos o elementos críticos difíciles de conseguir.
Potencial
La implementación de esta tecnología puede transformar completamente la forma en que almacenamos energía:
- Aumenta la vida útil de las baterías reduciendo la degradación.
- Reduce el riesgo de incendios al eliminar materiales inflamables.
- Disminuye la dependencia de componentes contaminantes o de alto coste ambiental.
- Facilita la producción masiva gracias a su compatibilidad con procesos existentes.
- Mejora la eficiencia de sistemas renovables como paneles solares o turbinas eólicas, al permitir almacenamiento más seguro y denso.
Este tipo de innovación se alinea con un futuro energético más limpio y seguro. Reemplazar baterías líquidas por baterías sólidas eficientes y libres de amianto representa un paso estratégico hacia una economía verdaderamente verde.
Vía www.tum.de
EDUARDO BRETON MUNOZ dice
una excelente aportación a la sustentabilidad.