Pablo Sánchez, que dirige el proyecto «The Health Impact» en el Líbano, se ha hecho viral en twitter tras un hilo donde da unos «Consejos sobre qué cosas donar y, sobre todo, qué no donar».
Pablo, que trabaja de tú a tú con personas a las que le llega la ropa que se dona, puede opinar de primera mano y con conocimiento del mundo de la ropa usada donada.
El hilo es muy recomendable para cualquiera, donde encontraremos consejos de todo tipo.
¿Te sobra ropa y quieres donarla? ¿Quieres hacer algo por los demás? Estupendo. Pero antes te voy a dar unos consejos sobre qué cosas donar y, sobre todo, qué no donar.
Trabajo con personas refugiadas. He pasado meses catalogando prendas y quiero contaros algo:
Un truco muy sencillo para identificar si algo puede ser donado es preguntarse: ¿me pondría yo esto? De forma no irónica, claro. La cantidad de mierda que se da es increíble porque, total, va para los pobres y si tienen frío una prenda es una prenda.
La gente necesita, ante todo, ser respetada. En todas sus formas. Si no vistes de payaso a tu hijo en invierno pero se lo das a otros niños es muy posible que el payaso no sea el que se ponga la prenda. También hay que pensar a quien se dona la ropa. Aquí hablamos de población musulmana.
Qué menos que tener en cuenta sus creencias para no darles una chaqueta de Papá Noel, vamos. Y ya no hablamos de la calidad. Estaba sucia y se deshacía de lo vieja que era, lo cual me lleva al siguiente punto donar no significa sacar la basura, desgraciado.
El derecho a vestir adecuadamente está ampliamente reconocido. Se entiende que si donas es porque quieres hacer algo bueno por alguien y tu beneficio personal se queda en un segundo plano. Ahora bien, no todo es la calidad de la ropa, también su estado.
Donar prendas con restos de mierda y pis es de mala gente, por no decir otra cosa, así que, por favor, lavadlo. «Bueno, algo es algo» NO. Es un tema importante del que quiero hablar porque cada vez más gente que no sabe que hacer con sus basura decide dársela a las familias que menos tienen como si fueran a aceptar cualquier cosa.
Un pantalón sucio y una camiseta rota no valen más que la dignidad de una persona. Por favor, empatía. Pongámonos en su lugar.
Os dejo otras fotos con más «ropa» donada: meada, rota, sucia… Este hilo parece obvio como muchos decís, pero no lo es. No para todo el mundo. Si algo necesitan las personas más vulnerables es un poco más de calidad en sus vidas.
Pablo Sánchez, «The Health Impact«
Si no sabes que hacer con la ropa que ya no usas, te damos algunas ideas en este artículo.
Más información: thehealthimpact.org
Deja una respuesta