Combina baterías de portátiles viejas con paneles solares para crear una fuente de alimentación independiente de la red eléctrica, convirtiendo básicamente una pila de desechos electrónicos en una solución energética sostenible.
En el verano de 2016, un video en YouTube cambió radicalmente la perspectiva de un ingeniero sobre el uso de las energías renovables. Un ciclista recorría 100 kilómetros en una bicicleta eléctrica impulsada por baterías recicladas, un hecho que marcó el inicio de una revolución energética personal que demuestra cómo la creatividad y la innovación pueden transformar la forma en que usamos la energía.
De los primeros pasos a la autoconsumo energético
Desde pequeño, el protagonista de esta historia estuvo expuesto a conceptos de autoconsumo energético. Su padre había instalado un generador eléctrico en casa hace más de cuatro décadas, y más tarde le regaló sus primeros paneles solares de 45 W. Aunque inicialmente solo podía alimentar luces LED y experimentar con pequeños dispositivos, estos avances plantaron la semilla de un futuro más ambicioso.
Con el tiempo, adquirió paneles solares con una capacidad total de 1500 W, combinados con una batería de 24 V de un montacargas, un regulador de carga MPPT Victron y un convertidor de 3000 VA. Este sistema, aunque limitado, permitió alimentar gran parte de su hogar durante los meses soleados. Sin embargo, la alta demanda de ciertos electrodomésticos, como la lavadora, evidenció la necesidad de mayor capacidad y potencia.
Innovación con baterías recicladas
Una de las decisiones más significativas fue el uso de baterías recicladas tipo 18650, extraídas de dispositivos electrónicos desechados. Tras desmontar baterías de portátiles antiguos, diseñó y ensambló su primer paquete, utilizando un sistema que permitía reemplazar celdas defectuosas y mantener un equilibrio óptimo entre seguridad y rendimiento. A medida que perfeccionaba sus métodos de prueba y ensamblaje, aumentó la capacidad de los paquetes hasta alcanzar 1 kWh por cada módulo.
Con estos avances, pudo construir un sistema con 7 kWh de almacenamiento energético, suficiente para cubrir gran parte de las necesidades diarias de su hogar. Sin embargo, los retos no cesaron. Para optimizar la producción solar, decidió reubicar los paneles al fondo del jardín y construir un pequeño cobertizo para albergar las baterías, minimizando las pérdidas por sombreado.
Escalando la capacidad del sistema
La evolución de su sistema fue constante. Cada vez que alcanzaba un nuevo hito, surgía la necesidad de ampliarlo. Pasó de 7 kWh a 14 kWh, luego a 28 kWh, y finalmente alcanzó una capacidad de 42 kWh gracias a la construcción de múltiples niveles de almacenamiento. Este sistema incluye más de 6300 celdas, 7000 Wp de paneles solares y un convertidor de 8 kVA que permite que la casa funcione al 100%, incluyendo electrodomésticos de alta demanda.
Optimización del consumo y producción excedente
El excedente de producción solar fue aprovechado para reducir la dependencia de combustibles fósiles. Por ejemplo, instaló un calentador de agua de 100 litros y 1500 W, así como electrodomésticos eléctricos como una placa de inducción y un horno, disminuyendo así el uso de gas. También conectó un Venus GX, un sistema que integra todos los dispositivos Victron y proporciona monitoreo en tiempo real de la producción y consumo energético.
Movilidad sostenible y visión a futuro
La llegada de vehículos eléctricos marcó un nuevo capítulo en esta transformación energética. Primero, una Nissan Leaf, y luego una Tesla Model 3, cuyas baterías de 74 kWh complementaron el sistema. Este enfoque demuestra cómo las energías renovables no solo pueden alimentar un hogar, sino también impulsar soluciones de movilidad sostenible.
Lecciones clave
- Planificación evolutiva: Desde el inicio, la clave fue diseñar un sistema modular y escalable.
- Uso de tecnologías recicladas: La reutilización de baterías demostró ser una solución efectiva y sostenible.
- Adaptación a las necesidades: Cada ampliación respondió a demandas específicas, desde el consumo doméstico hasta la carga de vehículos eléctricos.
Este ejemplo ilustra cómo la combinación de conocimientos técnicos, creatividad y compromiso puede llevar a una verdadera independencia energética. Más allá de los logros técnicos, esta historia inspira a otros a considerar el poder de las energías renovables como una herramienta para construir un futuro más sostenible y resiliente.
Puedes seguir el proyecto en: secondlifestorage.com
Anónimo dice
Cuando una una de esas baterías recicladas salga ardiendo ya hablará el seguro.
jacinto, dice
felicitaciones!!!!
creatividad, conocimiento, y aplicación para la humanidad
Cascabel dice
Definitivamente la energía renovable y limpia es nuestro futuro; va permitir alejarnos cada vez más de la huella del carbono…eliminando el uso del petróleo y otros derivados para siempre…
Reinaldo dice
Me parece un gran logro por parte de esa persona, todos los que tengan la posibilidad de hacerlo creo que deberían de tomar nota pues debemos luchar por un mundo más limpio que es lo que le vamos a heredar a nuestros hijos y nietos; muy bien por ese gran hombre, bendiciones
Anónimo dice
Muy buena decisión inteligente y evolutiva, la. necesidad nos lleva a innovaciones supuestamente inalcanzables.