Actualizado: 10/09/2021
Una empresa multinacional propone solución para evitar inundaciones en ciudades donde las condiciones e infraestructuras están anticuadas y/o precarias.
La intención es responder a los efectos del cambio climático en los sistemas de infraestructura actuales.
Además una de las apuestas en materia de infraestructura y saneamiento en las grandes ciudades es la infraestructura verde y azul.
Por esta razón Ramboll, una consultoría multinacional especializada en diseño urbano, ingeniería, medio ambiente y proyectos multidisciplinarios apuesta a esta infraestructura.
La infraestructura verde y azul integra las aguas pluviales con el paisajismo. Integra así el agua con el ambiente urbano a través del aumento de áreas de infiltración y evaporación.
También esta infraestructura verde-azul es una solución a los problemas en crecimiento de contaminación difusa y drenaje de las zonas metropolitanas. Los drenajes convencionales, por desgracia, están siendo cuestionados en todo el mundo.
La cuestión principal ahora es aprender a convivir con el agua en su lugar de origen, priorizando la infiltración, reservación y evaporación. Hoy día no debería haber ciudades que tengan soluciones anticuadas y precarias.
El escenario de cambios climáticos, con la alteración del régimen pluvial y concentración de las lluvias en pocos eventos, impone una revisión de los sistemas tradicionales de infraestructura.
Una situación que constituye una oportunidad para introducir la infraestructura verde-azul como sistemas complementarios a los tradicionales sistemas de drenaje. Se trata de insertar elementos en el paisaje urbano como jardines filtrantes, cisternas verdes, biocanaletas, wetlands, parques con lagos.
Un ejemplo de éxito de Ramboll en infraestructura verde-azul fue entonces el sistema de drenaje sostenible del parque en Singapur Bishan-Ang Mo Kio Park.
Con soluciones como estas, las grandes ciudades podrían resolver las inundaciones y el impacto sobre el sistema de saneamiento, aumentando así las opciones de ocio en las áreas urbanas.
En Singapur por ejemplo, era necesario expandir la capacidad del canal Kallang en el borde del parque. En consecuencia los trabajos se realizaron simultáneamente, transformando el canal de hormigón en un río. Además creando nuevos espacios de ocio para sus habitantes.
El canal de hormigón de 2,7 km fue convertido en un río natural de 3,2 km que bordea el parque.
También se rediseñaron 62 hectáreas para acomodar el sistema fluvial. Esto incluye niveles de agua flotante que proporcionan beneficios a los usuarios del parque.
La exposición a la naturaleza puede ayudar a inmunizar nuestros cerebros contra los efectos del estrés urbano y también puede mejorar la función cognitiva. Se hace necesario tener oasis urbanos con espacios verdes que mejoren la vida de sus habitantes.
Más información: ramboll.com
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