TransnetBW colabora con Fluence Energy en la construcción de una instalación de almacenamiento de energía verde de 250 MW en un tramo de terreno. Esta reserva de energía garantizará una mayor estabilidad y menores costes para los consumidores.
Decenas de contenedores repletos de baterías de iones de litio en un terreno equivalente al de 4,5 campos de fútbol.
El municipio alemán de Kupferzell tendrá, hasta el momento, la mayor reserva de energía del mundo.
Todas las baterías combinadas tendrán una capacidad de 250 MW. El proyecto desempeñará un papel importante en la transición energética y en la optimización del consumo de energía en Alemania.
TransnetBW está a cargo del proyecto. TransnetBW es uno de los cuatro principales operadores de la red eléctrica alemana y una filial de la empresa energética EnBW.
Según la empresa germano-estadounidense el generador de emergencia puede encenderse y apagarse en milisegundos. Esto, según TransnetBW, garantiza una mayor seguridad, así como menores costes y mayores ingresos.
Bajará los precios gracias a que la energía verde se utiliza de forma más eficiente y entonces se necesitan menos otras capacidades de reserva externas más caras. En Alemania, esto supone una ganancia potencial de miles de millones de euros, que beneficiarán en gran medida a los consumidores.
Fluence no es un recién llegado en el campo del almacenamiento de energía. Hasta ahora ha realizado 205 proyectos de este tipo.
Pero 250 MW no son suficientes para resolver todos los problemas. Habrá que establecer muchos más suministros de energía. No necesariamente tendrán que ser baterías.
No sólo eso, sino que la energía verde en Alemania se produce principalmente en el norte, mientras que la mayor parte de la industria se encuentra en el sur. Esto significa que hay que mejorar las redes eléctricas para que la transición energética tenga mayor eficiencia.
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