Actualizado: 13/06/2017
Encontrarnos con empresas que quieren reducir día a día su impacto medioambiental, para nosotros es motivo de alegría. Hoy conocemos que Consum, una cooperativa valenciana con 661 supermercados repartidos por toda España, ha reducido su huella de carbono durante 2015 en un 2,6%. Lo ha conseguido reduciendo su consumo de energía (12.792 MWH menos), reduciendo sus emisiones de CO2 (2.853 tn menos) y aumentando el reciclaje (17.416, 8 tn de cartón, 1.544,2 tn de plástico y 3,44 tn de cartuchos de impresoras).
Reducir la huella de carbono genera grandes y tangibles beneficios para empresas y organizaciones, les permite identificar los puntos de sus procesos comerciales donde se está contaminando más y los incentiva a ejecutar políticas de reducción de emisiones para la obtención de certificados internacionales que les califiquen por tener una baja huella de carbono, además de cumplir las normativas medioambientales vigentes. En este sentido, la Unión Europea ha establecido unos objetivos ambiciosos, como la reducción del consumo energético en un 20% hasta 2020.
En el caso de Consum, las acciones se centran en la gestión eficiente de los recursos naturales, de los residuos y de los consumos. Y lo que no es menos importante y para nosotros algo fundamental, involucrar a toda la plantilla de la empresa en la implementación de estas medidas. Mejorar la formación e información de sus empleados en particular, y de sus clientes en general, aumentan el porcentaje de éxito de las medidas a adoptar.
La reducción de la huella de carbono debe ir acompañada de una importante inversión por parte de las empresas, una inversión que tiene su retorno económico y medioambiental. En empresas como Consum, la eficiencia energética es un factor esencial en las decisiones sobre inversiones que toman diariamente, además de sistemas de regulación de temperatura integrados o electrodomésticos altamente eficientes.
Consum ha invertido 8,9 millones de euros en su Plan de Ahorro y Eficiencia Energética, medidas destinadas a reducir su impacto ambiental. La inversión más importante ha sido la inversión de 4,3 millones de euros en la mejora de sus instalaciones frigoríficas.
Esta importante inversión ha supuesto un ahorro para la cooperativa de 16 millones de euros, casi el doble de lo invertido. Así que como vemos, el invertir en medidas cuya finalidad es el ahorro y la eficiencia, tiene su recompensa, tanto económicas para las empresas que las implementan como medioambientales para la población y el mundo en general.
Con su plan de ahorro y eficiencia energética, Consum ha dejado de emitir más de 33.000 toneladas de CO2.
La medida más importante que han adoptado ha sido ampliar su red de supermercados Ecoeficientes, teniendo un total de 317 con esta denominación, el 73% de su red propia. Estos supermercados consumen un 25% menos de electricidad que un supermercado convencional.
Las medidas concretas que Consum ha llevado a cabo podríamos resumirlas en:
- Consumo energético: El 70% del consumo de Consum procede de fuentes de origen renovable.
- Ahorro energético: Medidas orientadas al cambio de iluminación a LED y otros sistemas de iluminación de bajo consumo, cierre de muebles, murales y arcones, así como el aprovechamiento del calor residual.
- Reciclaje: En sus supermercados han recogido 58,95 toneladas de pilas, un 35,5% más que en 2014. Han reciclado 17.416,8 toneladas de cartón y 1.500 toneladas de plástico, un 7,5% más que en 2014.
- Ahorro de agua: Han reducido el consumo de agua por superficie de sala de ventas en 6 puntos.
- Sustitución de los gases más contaminantes en los sistemas frigoríficos.
- Control del transporte de mercancías.
- Uso de bolsas reutilizables de 15 usos. Certificadas por AENOR como reutilizables, fabricadas con material reciclado ahorrando energía y agua.
La implicación e inversión de las grandes empresas en acciones y medidas que tengan como objetivo reducir su impacto medioambiental, es fundamental para superar los retos que como sociedad tenemos actualmente. El cambio climático requiere del esfuerzo y cooperación de todos, tanto de las empresas como de los consumidores.
Como consumidores tenemos la obligación de depositar nuestra confianza en empresas responsables, que contribuyan con sus políticas medioambientales a reducir día a día su huella de carbono y su impacto en el medio ambiente.
Uno de los retos de Consum en este 2016, será superar la primera Auditoría Energética que ha implementado el Real Decreto de ‘Medidas urgentes para la competitividad y la eficiencia energética’.
Ejemplos a imitar.