Actualizado: 06/10/2022
La Cumbre del Clima que se desarrolló la semana pasada en Madrid lo volvió a dejar bien claro: la Tierra sufre cada vez más el efecto negativo del cambio climático.
La actividad humana sin conciencia por ecológica hizo estragos en muchos lugares del mundo. Paisajes que se perdieron, otros que cambiaron, unos que se arruinaron. Ecosistemas diferentes, animales que se extinguieron por no haberse adaptado y catástrofes naturales que antes no existían, se suceden cada vez más a menudo en países y regiones que anteriormente eran tranquilos.
Las industrias y fábricas, con sus chimeneas a cielo abierto, quemando combustibles fósiles, son una de las principales fuentes de contaminación existentes. Incluso el turismo, que está considerado mundialmente “la industria sin chimeneas”, genera contaminación al medio ambiente.
Los expertos reunidos en la COP25 realizada en la capital española determinaron que el cambio climático puede hacer «desaparecer» la actividad turística debido al efecto de la huella de carbono que genera ese sector.
Se estima que la actividad turística produce un 8% de los gases emitidos hacia la atmósfera. Pero, al mismo tiempo, representa el 10% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial. El estudio presentado, que analiza los datos del año 2017, indica que el turismo creció un 50% más rápido que el promedio de la economía mundial.
Estas cifras remarcan la importancia que actualmente tiene la actividad turística para la sociedad. Uno de cada cinco trabajadores de todo el mundo vive gracias al turismo.
La pregunta que surge tras recibir toda esa información es la siguiente: ¿Cómo conseguir que la industria turística pueda seguir creciendo y generando beneficios pero sin contaminar el planeta, para cuidarlo porque sus bellezas naturales son el principal producto que tiene para ofrecerle a sus consumidores? La respuesta podríamos encontrarla en la utilización de las energías renovables.
Qué son las energías renovables.
Si tomamos como ejemplo el sistema eléctrico español, nos encontraremos con que es uno de los más diversificados del mundo. Tiene 14 distintos tipos de tecnologías que producen energía. Esta particularidad se da gracias a las energías renovables, en las que España es líder mundial entre los países que más invierten.
Las energías renovables más utilizadas en el país son la Hidráulica (en base al agua), Hidroeólica(agua y viento), Eólica (viento), Solar fotovoltaica (Sol), Solar térmica (Sol y calor), Térmica renovable (calor) y Residuos renovables.
Este año, España multiplicó siete veces su inversión en energías renovables. En total, se inyectaron al sistema 7.800 millones de dólares para construir centrales e instalaciones con estas tecnologías verdes.
El turismo corto, el primero para mejorar.
El director del Desarrollo Sostenible de Turismo de la Organización Mundial de Turismo, Dirk Glaesser, subrayó en la Cumbre del Clima de Madrid que «las emisiones que genera el transporte del sector turístico en el medio ambiente constituyen el 5% del total mundial».
Las previsiones dentro de diez años estiman que habrá 35.600 millones de visitantes que realizarán viajes cortos y que la actividad turística llegará a representar el 11,5% del PIB mundial. Pero este constante crecimiento elevaría a 21% la porción de emisiones contaminantes que sería producido por el transporte turístico.
Como el turismo corto, con destinos cercanos y con pocos días de paseo, es el que principalmente necesita de transporte motor, es el primero que puede empezar a cambiar sus estrategias para colaborar en la lucha contra el cambio climático.
En el rango del llamado turismo corto, España tiene una historia y diversidad cultural tan rica y potente en sus diferentes regiones que cualquiera de los destinos que ofrece es excelente para disfrutar de unos días de vacaciones o descanso. También nos da vastas posibilidades para elegir diferentes lugares mágicos y especiales para organizar eventos. Bodas, cumpleaños, reencuentros y reuniones sociales o empresariales pueden realizarse en un marco distinto, para que esa celebración sea inolvidable para todos sus participantes. Un lugar ideal para eso es el Castell de Sant Mori.
Castell de Sant Mori.
Esta magnífica construcción está levantada en el corazón del Ampurdán, una histórica comarca de Cataluña, situada en la provincia de Girona. Actualmente, el Ampurdán se divide en cuatro comarcas administrativas: Alto Ampurdán, Bajo Ampurdán, Pla de l’Estany y Gironés.
Específicamente en el Alto Ampurdán, una tierra que tiene a los maravillosos Pirineos de un lado y al seductor Mar Mediterráneo del otro, los vientos y la espectacular belleza de la naturaleza se combinará con la historia, la cultura y la gastronomía local para regalarle al visitante que elija al Castell de Sant Mori un momento único e inolvidable en su vida.
Situado en el centro del pueblo de Sant Mori, el castillo fue construido en el siglo XV y remodelado varios años después para adaptarse al estilo arquitectónico gótico-renacentista que deslumbra a cualquiera que se acerca a sus impresionantes muros.
Consecuencias de la industria “sin chimeneas”
El secretario de Cambio Climático y Desarrollo Sustentable de Argentina, Carlos Gentile, manifestó durante la Cumbre de Madrid que tanto en su país como en la mayoría del planeta, “las zonas turísticas están experimentando transformaciones debido al cambio climático».
Gentile citó como ejemplo «el aumento del nivel del mar en la costa o la pérdida de nieve en los destinos fríos».
Estos efectos negativos, todavía, no se han sufrido específicamente en el Alto Ampurdán, una tierra que tiene a los maravillosos Pirineos de un lado y al seductor Mar Mediterráneo del otro, donde los vientos y la espectacular belleza de la naturaleza se combinarán con la historia, la cultura y la gastronomía local para regalarle al visitante que elija al Castell de Sant Mori un momento único e inolvidable en su vida.
Su estratégica ubicación en el corazón del Ampurdán convierte al castillo en un lugar ideal para la presentación de productos alimenticios, nuevos vinos o añadas, efectuar catas y disertar largamente alrededor de la mesa.
La cultura gastronómica de la región es un polo de atracción inevitable cuando uno llega al castillo. Los mercados semanales en los diferentes pueblos de la Costa Brava le darán al visitante la posibilidad de degustar todos los sabores, colores y olores de la gastronomía típica, que influyeron en la creatividad del mundialmente reconocido chef Ferran Adrià, quien revolucionó la alta cocina en el planeta a través de su famoso restaurante catalán Bulli.
El Castell de Sant Mori está íntimamente ligado al hermoso ecosistema en el que está edificado. De hecho, el encanto natural de sus alrededores es el valor agregado que este lugar les ofrece a sus visitantes. Esta misma situación se repite en tantísimos lugares de España y el mundo que viven del turismo. Y que, para conservar las maravillas que pueden ofrecer a los visitantes, deben llevar adelante una actividad amigable con el medio ambiente, como lo hace la industria energética cuando se nutre de recursos renovables.
Las energías renovables que más cuidan el futuro del planeta.
El primer recurso renovable que se utilizó en cantidades industriales fue el agua, a través de la energía hidráulica. La energía potencial acumulada en el agua pasa por una turbina y al moverla, comienza a funcionar un generador de energía eléctrica que finalmente podrá ser distribuida a diferentes y lejanos lugares.
Las centrales eléctricas hidráulicas no generan los inconvenientes ecológicos de las centrales térmicas o nucleares, con el tristemente célebre caso de Chernobyl como máximo exponente. Sin embargo, aún no han podido solucionar los daños en ríos que provocan las construcciones de represas.
Más eficientes y amigables con el ambiente son las energías eólica y solar.
La energía eólica utiliza un recurso renovable como lo es el viento. También es considerada una energía “limpia” porque no genera la contaminación ni el daño al medio ambiente que mencionamos en los casos anteriores.
La potencia del viento moverá grandes hélices de molinos ubicados en lugares estratégicos. Al girar, acciona un generador que produce electricidad que se almacenará en baterías para luego ser utilizada.
La energía solar es la energía verde que más se desarrolló en los últimos tiempos. Se basa en la fuente de energía que más abunda: el sol. No es casualidad que la energía fotovoltaica sea la favorita para en el futuro ser la responsable de la mayor cantidad de electricidad.
Los paneles solares absorben la energía de los rayos se nuestra estrella más cercana. A través de un proceso químico, convierten esa luz en voltios. Esa energía se acumulará en baterías de 12v y luego será convertida a voltajes aprovechables de 120 V.
Para cuidar nuestro futuro, primero debemos conocer nuestro pasado.
Para poder valorar y transmitir legado del cuidado de los recursos renovables y la no contaminación en un planeta donde el turismo apunta a convertirse en un sector económico autosustentable, primero debemos conocer las maravillas que esta actividad tiene para ofrecernos. Un hermoso ejemplo de esto es el Castell Sant Mori. Sus muros conservan aún historias y recuerdos que son de alto impacto en la historia de la región y de toda España. Cuando uno camina por sus pasillos puede impregnarse de la estancia de la reina Juana Enríquez y de su hijo Fernando, que sería conocido mundialmente como Fernando el Católico, el impulsor –acompañado de su esposa Isabel- del viaje que culminó con el descubrimiento de América por parte de Cristóbal Colón.
La Reina Juana viajó a Sant Mori desde Castilla. Al llegar a este castillo fue recibida por su vasallo Pere de Rocabertí, quien fue el primer barón de Sant Mori. La Reina había arribado para asumir el mando de las tropas durante distintos conflictos bélicos que ocurrieron esta zona. Durante su estancia en Sant Mori fueron convocadas las Cortes Catalanas, el 15 Octubre 1466, para darle un punto final a los enfrentamientos regionales.
El legado cultural del castillo llega hasta nuestros días gracias a que desde aquel lejano siglo XV hasta hoy, la edificación ha pertenecido a la misma familia. Esta continuidad es algo poco común en la zona. Justamente, esto explica en parte por qué la histórica construcción se mantiene en un excelente estado para que sus visitantes puedan disfrutar completamente de sus maravillosas instalaciones.
El castillo hoy.
La majestuosa e imperial decoración del castillo se ha mantenido a lo largo de los siglos. Por eso, al atravesar sus muros el visitante se sentirá transportado al pasado glorioso de España. Y una vez imbuidos de esa atmósfera tan especial que solamente allí se puede respirar, Sant Mori los invitará a participar de las múltiples actividades y entretenimientos como la hípica, la caza, el submarinismo en la Costa Brava y la visita a cercanos pueblos históricos como Cadaqués y Girona, entre otros.
El castillo puede alquilarse durante breves espacios de tiempo. Con una capacidad máxima de 44 personas cuando funciona a pleno, incluyendo dos casas anexas. Ofrece niveles de privacidad y de aislamiento difíciles de conseguir en un establecimiento hotelero normal. Los muros no sólo resguardan la historia del lugar, sino que cuidan de que la estancia en el castillo sea lo más placentera posible para los visitantes.
El castillo tiene tres plantas, un patio interior y una espléndida terraza jardín con piscina y barbacoa. En total hay 13 habitaciones, 13 baños y diferentes salones, con una capacidad de alojamiento para 28 personas. Con el anexo mencionado anteriormente, se puede llegar a albergar a 44 personas. Estos “extras” son antiguas dependencias del castillo. Adaptadas a su nueva función, se pueden alquilar de manera independiente gracias a sus entradas individuales. Pero también está la posibilidad de integrarlas al conjunto del castillo.
Es un lugar ideal para celebrar bodas íntimas, festejos familiares, reuniones con esos amigos que son como familia o pequeñas reuniones empresariales para festejar haber alcanzado un logro en conjunto en grupos de trabajo.
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