El informe usó modelos avanzados de riesgo de inundaciones en alrededor de 700.000 kilómetros de costas subtropicales y 121 países para evaluar el valor de los manglares.
Los manglares: un recurso clave para la protección costera y la sostenibilidad
Los manglares han demostrado un valor económico estimado en 855.000 millones de dólares por sus servicios de protección contra inundaciones a nivel mundial, según un estudio reciente del Centro para la Resiliencia Climática Costera de UC Santa Cruz. Este análisis, liderado por Pelayo Menéndez y Michael W. Beck, director del centro, está incluido en la edición 2024 del informe La Riqueza Cambiante de las Naciones del Banco Mundial.
Beneficios multifacéticos de los manglares
El informe, titulado Construyendo Resiliencia Costera con Manglares: La Contribución de las Defensas Naturales contra Inundaciones a la Riqueza Cambiante de las Naciones, resalta el papel fundamental de los manglares en la protección de comunidades costeras frente a inundaciones, marejadas ciclónicas y erosión. Además de reducir los riesgos de desastres, estos ecosistemas ofrecen beneficios adicionales como la mejora de la biodiversidad, la captura de carbono y el apoyo a los medios de vida locales.
A diferencia de las infraestructuras rígidas como muros de contención y diques, los manglares no solo son más económicos, sino que también proporcionan servicios ambientales esenciales. Con el cambio climático intensificando la frecuencia y la gravedad de las tormentas, los manglares se presentan como una solución natural y eficiente para mitigar los riesgos costeros.
Un activo natural invaluable
El análisis incluyó datos globales actualizados de 2020 y abarcó manglares en 121 países, cubriendo un total de 700.000 kilómetros de costas subtropicales. Utilizando modelos avanzados de riesgo de inundaciones, el estudio demostró que el valor de los manglares como defensa natural ha aumentado drásticamente en las últimas décadas debido al crecimiento de las poblaciones y la infraestructura costera. Entre 1996 y 2020, el beneficio acumulado de los manglares en términos de reducción del riesgo de inundaciones creció en 632.000 millones de dólares.
A pesar de la pérdida de cobertura de manglares impulsada por actividades humanas como la acuicultura y el desarrollo costero, su valor como barreras protectoras ha seguido creciendo. En 2020, los manglares protegieron a 61 % más personas y resguardaron un 109 % más de bienes materiales en comparación con 2010.
Países con mayores beneficios y desafíos pendientes
Los países que más se benefician anualmente de los servicios de protección de los manglares incluyen China, Vietnam, Australia, Estados Unidos e India. Sin embargo, regiones como Malasia, Myanmar y Taiwán han experimentado una disminución en los beneficios debido a la pérdida de manglares, lo que subraya la necesidad de intensificar las medidas de conservación en estos lugares.
Conservación y restauración: una inversión estratégica
El estudio concluye que proteger y restaurar manglares no solo tiene sentido desde una perspectiva ambiental, sino también económica. Estos ecosistemas son un pilar fundamental en las estrategias de adaptación al cambio climático, al combinar eficacia en costes, beneficios ecológicos y resiliencia climática. Además, herramientas como el Explorador de Resiliencia Costera, desarrollado por el Centro para la Resiliencia Climática Costera, brindan soporte para la toma de decisiones estratégicas en este ámbito.
Invertir en manglares es una acción visionaria que asegura beneficios a largo plazo. Como afirmó Beck: “Proteger y restaurar manglares no solo es bueno para el medio ambiente, sino que también es una decisión económica inteligente. Estas valiosas defensas naturales ayudan a construir resiliencia frente a las crecientes amenazas del cambio climático”.
Hacia un futuro sostenible
La preservación de los manglares es un paso crucial hacia un modelo de desarrollo más sostenible. Promover la restauración de estos ecosistemas no solo fortalece la capacidad de las comunidades para enfrentar desastres, sino que también contribuye a la salud del planeta al capturar carbono, proteger la biodiversidad y apoyar la economía local. La conservación de los manglares debe estar en el centro de cualquier política climática que aspire a un futuro más seguro y resiliente.
Deja una respuesta