Actualizado: 05/07/2024
En las células G/NMCA recién desarrolladas, Leclanché consiguió reducir el contenido de cobalto de los electrodos al 5 %. Además, la producción se basa por primera vez en un proceso de aglutinante al agua respetuoso con el medio ambiente.
El fabricante de baterías Leclanché SA ha conseguido reducir el contenido de cobalto de los electrodos NMCA (óxido de níquel-manganeso-cobalto-aluminio) del 20 al 5 % mediante un proceso ecológico a base de agua.
En este proceso, Leclanché prescinde por completo del uso de los disolventes orgánicos altamente tóxicos N-metilpirrolidona (NMP), que de otro modo son habituales en el proceso de producción. Las nuevas células G/NMCA de Leclanché tienen una densidad energética un 20% mayor, con el mismo tamaño, peso y muy buen rendimiento. Los cátodos NMCA basados en aglutinantes acuosos son más fáciles de eliminar y reciclables, según la empresa.
Con la producción en agua de los cátodos NMCA de alta capacidad, hemos alcanzado un hito decisivo en la tecnología de iones de litio. Hasta ahora, producirlos mediante procesos respetuosos con el medio ambiente se consideraba imposible. Pero ahora dominamos el proceso.
Hilmi Buqa, vicepresidente de I+D de Leclanché.
Leclanché afirma que es la primera empresa del mundo que aplica este proceso respetuoso con el medio ambiente en la producción de células de ión-litio: La nueva célula G/NMCA tiene un contenido de níquel de aproximadamente el 90%. Se supone que esto aumentará la densidad energética y permitirá reducir significativamente el contenido de cobalto en un 15%. Al mismo tiempo, se supone que ofrece una vida útil más larga, una elevada estabilidad de ciclo y una buena capacidad de carga. Gracias a su alta densidad de volumen y a la gran estabilidad de ciclo, las nuevas pilas resultan especialmente adecuadas para coches eléctricos y aplicaciones pesadas como barcos, autobuses y camiones.
Proceso de fabricación al agua de células G/NMCA de Leclanché
Leclanché lleva unos 13 años utilizando aglutinantes al agua en su proceso de fabricación. En el proceso, técnicamente más sencillo, no se utilizan disolventes orgánicos. De este modo, no sólo se elimina el riesgo de explosión, sino que tampoco hay peligro para la salud de los empleados en el proceso de producción.
Otra ventaja: gracias al proceso al agua, Leclanché puede prescindir de los procesos de secado, evaporación y reciclado de disolventes, que consumen mucha energía. Debido a que el consumo de energía es entre un 10 y un 30% menor, el proceso Leclanché también mejora la huella de CO2 de la producción de células de batería. Por tanto, no sólo ofrece ventajas ecológicas, sino también económicas.
Leclanché es uno de los pocos fabricantes independientes de baterías de iones de litio de Europa. Las células de gran formato se fabrican íntegramente en Alemania, en la planta de Willstätt (Baden-Württemberg), mientras que la producción de módulos de Leclanché se lleva a cabo en una línea de montaje automatizada de última generación en la sede de la empresa en Yverdon (Suiza).
Más información: www.leclanche.com
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