Actualizado: 08/05/2022
Con su característico sabor amargo, el ruibarbo es una planta similar al apio y tiene interesantes beneficios para la salud.
El ruibarbo es una planta herbácea, de aspecto similar al apio, con largos tallos rojizos y hojas verdes en la parte superior.
Originaria del Tíbet y del oeste de China, es un remedio natural centenario en la medicina tradicional china. Como alimento tiene un típico sabor amargo y es conocido por sus propiedades digestivas y depurativas.
A pesar de sus interesantes propiedades beneficiosas, el consumo intensivo de este alimento debe evitarse en niños y mujeres embarazadas y lactantes. En general, se recomienda un consumo moderado.
Beneficios Ruibarbo.
El consumo de ruibarbo puede algunos de los siguientes beneficios para nuestra salud:
- Puede ayudar a mejorar la salud de nuestros ojos, la luteína es un antioxidante que puede ayudar a proteger la mácula ocular.
- Prevenir enfermedades cardiovasculares, contiene fibras que pueden reducir la absorción de colesterol en el intestino y antioxidantes que pueden prevenir la ateroesclerosis.
- Ayuda a regular la presión arterial, los antioxidantes tienen un efecto antiinflamatorio.
- Mejora la circulación sanguínea. Es rica en potasio, mineral que puede ayudar a relajar los vasos sanguíneos.
- Mejorar la piel gracias a la vitamina A.
- Fortalecer sistema inmunitario, gracias al selenio y la vitamina C.
- Aliviar síntomas menopausia, los fitoesteroles pueden ayudar a reducir los sofocos.
- Gracias a los antioxidantes, puede ayudar a mejorar la memoria y prevenir enfermedades neurodegenerativas.
Ruibarbo: usos en la cocina
Antes de utilizar el ruibarbo como ingrediente en nuestra cocina, hay que limpiar las hojas y quitarle los tallos, como ocurre con el apio.
A continuación, se cortan en trozos de tamaño variable según la preparación. Para un sabor más dulce, es aconsejable elegir los tallos más rojos. Las hojas suelen desecharse por su alta concentración de ácido oxálico.
Este ingrediente natural se utiliza principalmente en confituras y mermeladas, así como en pasteles y tartas.
Con este ingrediente natural también se pueden preparar infusiones y decocciones de gran efecto laxante.
También se puede utilizar en las ensaladas para darles un sabor diferente.
Consulta a tu médico antes de comenzar cualquier tratamiento con plantas medicinales.
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