La bomba de calor DualPAC, fabricada en la planta de Johnson Controls en Dinamarca, es el núcleo de un proyecto pionero desarrollado en el municipio de Neustadt en Holstein, Alemania. Este innovador proyecto está financiado por el Ministerio Federal de Economía y Protección Climática de Alemania, y representa un paso significativo en la transición hacia fuentes de energía renovables en el suministro de calefacción.
Johnson Controls, líder en la creación de edificios inteligentes, saludables y sostenibles, está suministrando a Neustadt una bomba de calor avanzada que utiliza agua del Mar Báltico para generar energía limpia. Esta tecnología proporciona calor a un nuevo distrito en el puerto de la ciudad mediante una red de calefacción dedicada. Esta solución basada en agua de mar es la primera de este tipo en Alemania a gran escala y constituye un modelo de referencia para la transformación del suministro de calefacción en Europa y el mundo.
Innovación en la Transición Energética
Las bombas de calor se destacan como una tecnología fundamental en la transición hacia energías limpias, proporcionando una alternativa eficiente y sostenible frente a los sistemas de calefacción a base de gas y petróleo. David Emin, gerente general de Johnson Controls en Alemania, destacó que este proyecto en colaboración con el municipio de Neustadt demuestra cómo la tecnología puede aprovechar recursos naturales abundantes. “Nos enorgullece aportar nuestra experiencia en este proyecto innovador que sienta un precedente para la neutralidad de carbono en Europa y más allá”, declaró Emin.
La bomba de calor SABROE DualPAC suministrada por Johnson Controls es un sistema modular de dos etapas, diseñado para proporcionar altos aumentos de temperatura, lo cual es ideal para aplicaciones de calefacción distrital. Utiliza agua de mar para generar una salida de calefacción de hasta 700 kW. Durante los meses de invierno, cuando el agua es más fría, extrae aproximadamente 500 kW de calor, el cual se eleva a una temperatura superior usando energía eléctrica y luego se distribuye a la red de calefacción del nuevo distrito. En momentos de alta demanda, este sistema se complementa con calor proveniente de una planta cercana de incineración de residuos y una instalación de almacenamiento de calor.
Descarbonización del sector de la calefacción
Actualmente, la mayor parte de las necesidades de calefacción en el mundo se cubren mediante la combustión directa de combustibles fósiles. La electrificación de estos sistemas a través de bombas de calor resulta esencial para descarbonizar los edificios y mantener una red eléctrica confiable. Las bombas de calor consumen solo un tercio de la energía utilizada por los sistemas de calefacción convencionales y, en función de las condiciones, pueden generar de tres a ocho veces más energía de la que consumen.
Johnson Controls fue una de las primeras empresas en ofrecer bombas de calor ecológicas hace más de 50 años y actualmente cuenta con una de las gamas más completas de bombas de calor a nivel mundial, diseñadas para aplicaciones comerciales, residenciales e industriales. Estas soluciones aprovechan una variedad de fuentes de energía natural, como el agua de mar, ríos y lagos, aguas residuales, calor residual, energía solar, biomasa y energía geotérmica.
Expansión en respuesta a la demanda creciente
Para atender el aumento en la demanda de bombas de calor en Europa, Johnson Controls ha ampliado sus instalaciones de fabricación en Holme (Dinamarca), Izmir (Turquía) y Nantes (Francia). Además, la empresa continúa expandiendo su portafolio para ofrecer calefacción de mayor temperatura en condiciones de frío extremo y para aplicaciones diversas. Entre sus clientes en Europa se incluyen grandes compañías como Hamburg Energy, Energie Baden-Württemberg y Stadtwerke Rosenheim.
Este tipo de tecnologías son esenciales en el contexto de la sostenibilidad, ya que permiten reducir considerablemente la huella de carbono del sector de la construcción, uno de los más demandantes en términos energéticos. Las bombas de calor no solo contribuyen a un uso más eficiente de los recursos energéticos, sino que también representan un ahorro significativo a largo plazo en los costos de operación, al reducir la dependencia de combustibles fósiles y aprovechar fuentes renovables y sostenibles.
El proyecto de Johnson Controls en Neustadt es un ejemplo pionero de cómo las ciudades pueden adoptar tecnologías innovadoras para avanzar hacia un futuro libre de carbono, haciendo uso de los recursos naturales de manera inteligente y sostenible.
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