Esta iniciativa ya ha salvado 10.000 olivos en la región de Teruel y está llevando nuevos productores a plantaciones abandonadas.
En el pequeño pueblo de Oliete, donde viven unas 350 personas, un proyecto está logrando frenar el abandono de los olivares y promover el regreso del hombre al campo.
Se trata del proyecto «Apadrina un Olivo», que anima a la sociedad a donar 50 euros al año para recuperar un olivo y asegurar su preservación, poniéndolo de nuevo en producción.
Los «padrinos», pueden poner un nombre a sus árboles, además de tener derecho a 2 litros de aceite de oliva por año.
Hoy en día, participantes de 15 países, además de España, colaboran con donaciones e incluso son invitados a visitar a sus «ahijados», promoviendo también el turismo en la región.
Hay unos 100.000 olivos en el municipio, que han sido prácticamente abandonados porque la población ha emigrado a las grandes ciudades. Algunos propietarios de viejos olivares son herederos que nunca tuvieron contacto con la tierra. Los pocos agricultores que quedaron, sin recursos, dejaron de producir aceite de oliva.
Con esta iniciativa, la región ya ha logrado rescatar 10.000 árboles y generar empleos tanto para el mantenimiento de los árboles centenarios como para la cosecha y producción de aceite de oliva.
Además, el organizador ha logrado promover en la región un sistema de ordenación de la tierra, que funciona mediante un acuerdo que permite a un agricultor producir en la propiedad de otro, asegurando el mantenimiento de un área natural.
El proyecto crea oportunidades en una zona rural cada vez más abandonada. A través de una iniciativa 4 «S» – Sostenible, Social, Solidaria y Saludable – los colaboradores y productores vuelven a trabajar para un aceite de oliva de calidad.
Revitalizar el campo
La iniciativa tiene un impacto ambiental positivo, trabajo para los agricultores locales y el aprovechamiento de la economía regional. La comunidad incluso creó la marca Mi Olivo, que produce 3 variedades de aceite de oliva.
Entre los 22 nuevos puestos de trabajo, hay miembros de ATADI (Agrupación Turolense de Asociaciones de Personas con Discapacidades Intelectuales) que están capacitados para ayudar a mantener los olivares y cosechar su fruto.
España es actualmente el mayor productor mundial de aceite de oliva y, aunque el olivo no es nativo de la Península Ibérica, se ha cultivado durante miles de años. El cultivo del olivo está muy extendido en el país.
Los árboles son bajos y alcanzan unos 4 o 5 metros de altura, tienen un tronco muy característico todo retorcido y pueden vivir más de 2 mil años. En cada cosecha un olivo adulto puede producir de 22 a 90 kilos de aceitunas.
La región de Olieto avanza poco a poco en su recuperación económica. La escuela se ha reabierto con la llegada de nuevos niños al pueblo, la mayor circulación de personas ha reactivado el comercio y el turismo empieza a despertar en la región.
Las donaciones están creciendo y trayendo esperanza a tantos otros olivos que aún necesitan cuidados. El proyecto de Olieto tiene todo para ser replicado en varios lugares igualmente abandonados.
Más información: apadrinaunolivo.org
Rosita Welcker dice
Yo creo que apadrinar no debe tener ni raza ni color menos discriminación alguna, ya que necesitan es recuperar !. Y aumentar ya que los árboles y Olivos son de todos y para todos por.igual
[email protected] dice
Te llamamos desde el equipo. Gracias
Medalit Violeta Carrión Herrera dice
Por el entusiasmo que me transmitió el articulo decidi amadrinar un olivo, …ahora me doy cuenta que no es lo que quiero. Yo no quiero APADRINAR ningún olivo,..Si quiero AMADRINAR, pero no es posible, las mujeres no tenemos cabida en éste proyecto tan hermoso. Como mujer que soy también tengo capacidad y dinero para amadrinar un olivo. Porfavor podrian ayudarme a recuperar el dinero que he pagado al suscribirme???… No me siento identificada.