Actualizado: 26/05/2021
A menudo, cuando se habla de la economía china, se nos viene a la mente un sistema de producción muy vinculado a industrias altamente contaminantes basadas en el consumo de carbón. De hecho, podemos ver de forma frecuente imágenes de las principales ciudades chinas cubiertas por el smog.
Pero la realidad no es tan dramática, o al menos ya no lo es tanto. China ha decidido abandonar su dependencia por el carbón y quiere impulsar su economía con las energías renovables.
Las inversiones no dejan lugar a la duda, en China se prevén inversiones de hasta 360.000 millones de dólares para 2020 en fuentes de energía limpia, lo que no da tregua a un sistema industrial anclado en el carbón. Las cifras que maneja China en torno a las energías renovables son difícilmente igualables por otros países.
En 2020 el 15% de la energía que consuma será procedente de energías limpias. Se han creado hasta ahora 13 millones de puestos de trabajo por el desarrollo de las energías renovables. En 205o China quiere generar más del 85% de su electricidad a partir de fuentes renovables.
En China se ha construido la mayor planta solar flotante del mundo. En un lago formado después de la explotación de los recursos fósiles se han colocado paneles solares que, gracias al agua, son más eficientes en la producción de energía alcanzando una capacidad de 40 MW.
La carrera por las energías renovables.
La apuesta china es decidida y muy importante. Como sabes, cuando China establece objetivos a largo plazo, muchas veces termina por alcanzarlos antes de lo esperado. Hoy día ya es el primer productor de energía solar y eólica. Además, al contar con las materias primas necesarias para la fabricación de, por ejemplo, paneles solares, el coste de las instalaciones es sensiblemente inferior a cualquier otra parte del mundo.
Los métodos de producción de electricidad limpia, además de la clásica central hidroeléctrica, históricamente usada y de gran impacto desde el punto de vista medioambiental, la energía eólica y solar, incluyen la energía geotérmica y la biomasa. En estos dos últimos tipos de renovables, China tiene un gran margen de mejora, el gigante asiático produce unos 660 MW de energía geotérmica frente a los 3500 MW de los Estados Unidos.
China además es uno de los grandes inversores en CCS, captura y almacenaje de CO2, con el que pretende reducir su alarmante contaminación atmosférica.
China es el país más poblado del mundo, con casi 1.400 millones de habitantes, está en plena expansión, aún no ha desarrollado una gran sociedad de consumo, aunque hoy por hoy ya es un gran devorador de recursos, por lo que el reto renovable es un objetivo que le va a exigir grandes esfuerzos.
¿Cómo invertir en energías renovables?
Una situación de desarrollo tan rápida y floreciente puede dar lugar a oportunidades de beneficios para que los inversores. De hecho, hay muchos expertos que recomiendan invertir particularmente en las renovables asiáticas.
En Europa, de hecho, la situación del sector de las energías renovables atraviesa un cierto período de estancamiento sin grandes cambios, ni positivos ni negativos. Por esta razón, los productos financieros más interesantes están relacionados con el desarrollo de Asia.
Recientemente han aparecido en los mercados europeos los ETFs (Exchange Traded Funds), fondos de inversión cotizados en bolsa que recogen algunos de los activos chinos que invierten en energías renovables de forma eficiente, ya que generalmente pertenecen a la categoría A.
La compra de acciones chinas tiene en los últimos años un cierto desarrollo incluso para los inversores no chinos. Sin embargo, hay que decir que todavía existen resistencias y obstáculos que los europeos, por ejemplo, deben superar para trabajar directamente con las acciones chinas. Además, este tipo de inversión puede resultar arriesgada debido a una cierta volatilidad de este tipo de valores de renta variable.
Las incertidumbres debidas a posibles variaciones en la moneda china no se deben subestimar, lo que podría reducir en gran medida los posibles beneficios.
Como resultado, muchos inversores se interesan en productos financieros más complejos como ETFs y fondos mutuos.
Una oportunidad aún mejor para ganar dinero a través de la economía verde es sin duda el uso del comercio online. Mediante la inversión en diversos índices y ETFs relativos a activos vinculados a la producción, distribución y venta de energía limpia, es posible obtener ganancias significativas.
¿Cómo invertir online en la economía verde?
Es importante operar online de forma segura y sin riesgo de estafas o situaciones desagradables.
Primero, necesitas encontrar una plataforma de trading online con licencia y regulada, que tenga clientes de muchos países de la Unión Europea y Estados Unidos.
Una vez que hayas encontrado la plataforma de trading adecuada, sólo tienes que identificar los activos que son más interesantes. Además de los bonos del Estado y el Forex, que es el cambio de divisas y, por lo tanto, no muy relacionado con la energía renovable, puedes invertir en ETFs e Índices.
Podrás operar gratis en todos los mercados financieros. Además, también está disponible una cuenta demo gratuita con la que puedes experimentar y mejorar tus conocimientos de la plataforma antes de empezar a invertir con dinero real.