La noticia se filtró en una reunión entre representantes políticos y empresarios: 41 países que participan en la iniciativa Road and Belt que podría «albergar» las plantas chinas.
China podría construir 30 centrales nucleares fuera de sus fronteras, en los países que se han adherido a la llamada «Nueva Ruta de la Seda»: la indiscreción fue revelada por Wang Shoulin, uno de los principales miembros de la Conferencia Política Consultiva del Pueblo Chino (CPPCC), la organización que representa a los distintos partidos chinos bajo la dirección del Partido Comunista.
Según el sitio web de la BJX, Wang ha identificado 41 países que ya poseen o están en proceso de aprobar planes energéticos basados en el desarrollo de la energía nuclear. Al negociar el 20% de la demanda potencial, Wang habría posibilitado la creación de hasta 5 millones de puestos de trabajo.
Los proyectos nucleares vinculados a los acuerdos firmados con la Nueva Ruta de la Seda deberían aportar casi 150.000 millones de dólares a las arcas de las empresas chinas en los próximos 10 años, explicó Wang.
La Nueva Ruta de la Seda ha recibido el apoyo directo de 60 naciones, principalmente de Asia, África y Europa, pero proporciona proyectos de financiación y construcción de nuevas infraestructuras en 152 países de todo el mundo.
Italia, en marzo de 2019, fue el primer país del G7 en unirse a la iniciativa, sin firmar un pacto vinculante. Los principales intereses chinos en el Bel Paese se dirigen al puerto comercial de Trieste, que debería convertirse en el punto de llegada de las mercancías procedentes del Pacífico, tras el tránsito por el nuevo Canal de Suez.
La expansión al exterior de los proyectos nucleares chinos responde a la necesidad de exportar la sobreproducción tecnológica e industrial del gigante asiático tras un largo periodo de estancamiento del sector dentro de las fronteras nacionales.
A principios de abril, el Presidente de la Corporación Nuclear Nacional de China, Yu Jianfeng, anunció un programa para construir de 6 a 8 nuevas centrales nucleares en China cada año hasta 2030. Un nuevo impulso a la industria que ha visto bloqueadas las concesiones para la construcción de nuevas plantas en los últimos 3 años.
En sus planes estarían las llamadas plantas de generación III, como el proyecto Hualong One, cuya construcción ha sufrido graves retrasos en China debido a problemas técnicos, pero que podría tener un nuevo impulso de clientes extranjeros.
Algunos siguen pensando que la energía nuclear puede ayudar a combatir el cambio climático, entre ellos Bill Gates. Otros pensamos todo lo contrario…
Deja una respuesta