
No requiere una infraestructura extensa como los trenes eléctricos y, a diferencia de los motores diésel, solo emite vapor de agua.
- Locomotora china a hidrógeno ya en pruebas.
- Autonomía: 140–150 km con 60 kg de hidrógeno.
- Recarga en 15 minutos, hasta 800 km de autonomía.
- Capacidad de arrastre: más de 4.500 toneladas.
- Hidrógeno obtenido localmente a bajo coste.
- Emisión: solo vapor de agua.
- Tren híbrido: pilas de combustible + batería de litio.
- Alta eficiencia: hasta 80 %, ideal para zonas de altitud.
- Proyecto integrado: carbón → coque → hidrógeno → trenes y camiones.
- Impacto: más de 3.000 toneladas menos de CO₂/año solo con 100 camiones.
CHINA PONE EN MARCHA SU PRIMERA LOCOMOTORA DE HIDRÓGENO PARA USO COMERCIAL
Primeros ensayos reales en Guizhou
El pasado 10 de mayo, China puso en operación su primera locomotora de hidrógeno de uso comercial, destinada a maniobras en la estación ferroviaria de Meijin, en la ciudad de Liupanshui, provincia de Guizhou. Se trata de un avance tecnológico relevante en el transporte de mercancías a corta distancia, especialmente en sectores como el carbón.
Prestaciones técnicas destacadas
Este tren, alimentado por 60 kilogramos de hidrógeno, puede recorrer entre 140 y 150 kilómetros antes de necesitar recarga. En condiciones óptimas, tras una recarga de tan solo 15 minutos, la locomotora puede alcanzar una autonomía de hasta 800 kilómetros arrastrando más de 4.500 toneladas métricas.
El sistema de propulsión es híbrido: pilas de combustible de hidrógeno junto con baterías de litio. Las pilas transforman el hidrógeno en electricidad directamente, mientras que las baterías almacenan la energía sobrante y proporcionan potencia adicional cuando se requiere.

Hidrógeno local y económico
Uno de los factores clave del proyecto es el suministro local de hidrógeno. El gas se extrae del gas de hornos de coque, un subproducto del proceso de conversión del carbón, lo que reduce el coste a aproximadamente un tercio del valor habitual de la electrólisis del agua.
Ventajas frente a alternativas tradicionales
A diferencia de los trenes eléctricos, este sistema no requiere redes de distribución eléctrica ni grandes infraestructuras de almacenamiento. Basta con los depósitos de hidrógeno en la propia locomotora. Además, es mucho más limpio que los motores diésel, ya que solo emite vapor de agua, eliminando la liberación de gases contaminantes y partículas finas.
Con una eficiencia energética del 80 %, duplica el rendimiento de los motores diésel y muestra un comportamiento sobresaliente en altitudes elevadas, donde los motores de combustión pierden potencia. Por ejemplo, en rutas como la del ferrocarril Qinghai-Tíbet, donde el oxígeno escasea, las pilas de hidrógeno son una solución más estable y eficiente.

Proyecto integral: del carbón al hidrógeno
Este hito forma parte de un proyecto mayor: la iniciativa «Carbón-Coque-Hidrógeno», una colaboración entre el gobierno local y la empresa Meijin Energy. La propuesta contempla:
- Producción de 3,8 millones de toneladas de coque metalúrgico al año.
- Generación de 40 millones de metros cúbicos estándar de hidrógeno de alta pureza.
- Red de estaciones de servicio de hidrógeno para trenes y camiones pesados.
Además del tren, ya están en funcionamiento 100 camiones pesados y 4 autobuses de 8,6 metros con pilas de hidrógeno, destinados a transporte urbano y rutas cortas. Solo estos vehículos evitarán la emisión de más de 3.000 toneladas de CO₂ anuales.
Potencial
Este proyecto marca un camino claro hacia una logística industrial más limpia. La conversión del gas residual en hidrógeno, en lugar de ser liberado o quemado, no solo reduce emisiones, sino que transforma desechos en energía útil y limpia.
En regiones con fuerte dependencia del carbón, como Liupanshui, la transición hacia tecnologías limpias como esta permite reducir la huella de carbono sin eliminar empleos ni frenar la actividad económica. El enfoque industrial circular —carbón para coque, coque para hidrógeno, hidrógeno para transporte— optimiza recursos existentes y reduce la dependencia de combustibles fósiles tradicionales como el diésel.
Además, al prescindir de infraestructuras eléctricas complejas y permitir un uso autónomo del hidrógeno, estas locomotoras pueden ser especialmente útiles en países en desarrollo o zonas aisladas con baja electrificación.
Si se replica a gran escala, esta tecnología puede revolucionar el transporte de mercancías sin depender de soluciones contaminantes, facilitando una transición energética realista, escalable y compatible con la sostenibilidad ambiental.
El modelo también demuestra que la innovación ecológica no está reñida con la industria pesada, y que incluso sectores históricamente contaminantes pueden evolucionar hacia cadenas de valor más limpias y resilientes, sin utilizar materiales peligrosos como el amianto, cada vez más restringido a nivel mundial por sus riesgos para la salud.
LIDIA ESPERANZA PIZARRO MIRES dice
Excelente Proyecto de innovación tecnológica, que trascenderá con gran potencial, ya que permite el transporte de mercancías, cargas pesadas optimizando los recursos existentes lo que reduce la dependencia de combustibles fósiles tradicionales como el diésel. El uso de tecnología limpia, revolucionará la logística en el transporte permitiendo el Enfoque Industrial Circular :-carbón para coque, coque para hidrógeno, hidrógeno para transporte) demostrando que la innovación ecológica no está reñida con la industria pesada, y que incluso sectores históricamente contaminantes pueden evolucionar hacia cadenas de valor más limpias y resilientes, facilitando una transición energética realista, escalable y compatible con la sostenibilidad ambiental.