Actualizado: 13/12/2022
Se acerca el invierno y con él los días se vuelven más cortos, las temperaturas descienden… y la factura de la electricidad comienza a convertirse en un miedo frecuente.
Sin embargo, el temor a recibir una factura de electricidad con un importe inasumible puede minimizarse un poco si llevamos a cabo un consumo inteligente y reducido. Para ello, es conveniente que en nuestro día a día apliquemos una serie de prácticas que reduzcan nuestro consumo.
Aquí os dejamos 8 consejos para ahorrar luz este invierno creada por Viaconto:
- Aprovechar las horas de sol: parece obvio, pero cuanto menos encendamos el interruptor, menos consumo de luz haremos. Para que esto sea posible, debemos echar mano de alternativas, ¡Y qué mejor que la luz solar! Es imprescindible saber en qué momentos del día está nuestra vivienda más expuesta a los rayos solares, para saber cuando subir o bajar las persianas. Una vez que ventilemos nuestro hogar, debemos cerrar las ventanas y dejar las cortinas abiertas en las horas centrales de sol. Una vez el sol se haya ido, cerrar las persianas y cortinas ayudará a retener el calor en el interior de los cuartos.
- La calefacción como última alternativa: si tras haber aplicado el consejo anterior, nuestra casa continúa estando fría, podremos encender la calefacción. Sin embargo, debemos evitar tenerla encendida durante largos periodos de tiempo y, en ningún caso, toda la noche, ya que, no solo será un gasto de energía innecesario, sino que, además, añadirá un par de cifras a nuestra factura.
- Usar un termostato programable: puede ser una solución muy práctica para controlar que no nos pasemos del tiempo necesario, sin tener que estar pendientes del tiempo ni sufrir despistes.
- Controlar los radiadores: cuando encendemos la calefacción damos por hecho que activará todos los radiadores de la casa. Sin embargo, muchas veces no es necesario. Cuartos que no utilizamos o zonas intermedias como la entrada de la casa o el pasillo no necesitan un radiador encendido. Cuando esto ocurre, es aconsejable cerrar los radiadores de los que podemos prescindir.
- Huir del consumo fantasma: algo que no todo o mundo sabe o de lo que no se percata es de que los electrodomésticos de nuestro hogar consumen energía si están enchufados, a pesar de que no los estemos utilizando. Para evitarlo, debemos ponerlo en modo stand by; una técnica simple pero que supone reducir su gasto un 12% y que puede ahorrar unos 70 euros al año de nuestros bolsillos.
- Bombillas de bajo consumo: su precio, un poco más elevado que el resto, compensa con creces el ahorro económico que nos supondrán a medio y largo plazo. Además de ahorrar hasta un 80% de energía, tienen una vida 8 veces más larga que el resto de bombillas y ofrecen la misma intensidad lumínica.
- Comparar los precios de las compañías: esto es algo que no siempre hacemos por miedo a la burocracia y a los trámites. Sin embargo, es un consejo que, si se pone en práctica de manera temprana, puede evitar que nos enfrentemos a deudas que, en muchos casos, acaban obligando al consumidor a echar mano de dinero urgente.
- Antes de salir de casa comprueba que no queda ninguna luz encendida.
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