Un proyecto piloto de un año en California demostró las ventajas de la excavadora eléctrica ECR25 y la pala de ruedas eléctrica L25.
Volvo Construction Equipment (Volvo CE) ha anunciado los resultados de un proyecto piloto en el sur de California con la excavadora compacta ECR25 Electric y la pala cargadora de ruedas compacta L25 Electric.
Durante casi un año, Volvo CE ha estado probando estas máquinas alimentadas por batería con varios clientes en obras. El objetivo era demostrar que son alternativas viables a los equipos diésel para que las flotas reduzcan la huella de carbono y aceleren el despliegue de soluciones de emisiones cero en este segmento.
Los resultados son alentadores y llegan justo cuando Volvo CE se prepara para el despliegue completo en Norteamérica de la ECR25 Electric (enero de 2022) y la L25 Electric (principios de 2022). Las conclusiones del proyecto piloto confirmaron que los equipos de construcción eléctricos de Volvo igualan las prestaciones y presentan importantes ventajas en comparación con las máquinas diésel de la misma gama de tamaño compacto.
Por ejemplo, en lo que respecta a la sostenibilidad, las máquinas eléctricas compactas ECR25 y L25 demostraron ser opciones sólidas, gracias a sus baterías de iones de litio y a sus cero emisiones. Además, como no emiten nada, pueden funcionar en el interior de edificios y otras estructuras en las que los gases de escape del diésel están restringidos.
Sobre la base de las 400 horas de funcionamiento combinadas durante el proyecto piloto, se produjo una reducción de 6 toneladas métricas de emisiones de CO2 y un ahorro aproximado de 2120 litros de combustible con un coste estimado de 2.400 dólares con respecto a las máquinas diésel.
Estas máquinas eléctricas también producen niveles de ruido significativamente menores (alrededor del 90%) que los equipos diésel. Reducen la contaminación acústica y mejoran la comunicación y la seguridad en la obra al facilitar que los miembros del equipo se oigan entre sí. Además, pueden trabajar en zonas sensibles al ruido.
Desde el punto de vista del rendimiento, la ECR25 y la L25 tienen especificaciones similares a las de sus equivalentes diésel, y el proyecto piloto lo confirmó.
Los participantes también valoraron positivamente la disminución de las necesidades de mantenimiento de las máquinas eléctricas (no necesitan aceite de motor, filtros de aceite, filtros de partículas diésel ni depósito de líquido de escape diésel).
El rendimiento se igualó en varias áreas clave, como la profundidad de excavación y la fuerza de arranque en la excavadora y la carga de vuelco y la altura de descarga en la cargadora de ruedas.
Los clientes utilizaron diversas fuentes, como la red eléctrica de 240 voltios de CA, la carga rápida, las fuentes de energía móvil y la energía solar.
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