Actualizado: 05/07/2024
Las plantas han encontrado la manera perfecta de aprovechar la energía del sol: la fotosíntesis. Durante mucho tiempo, la humanidad ha buscado formas de replicar este proceso, y finalmente, estamos un paso más cerca.
Del sol a combustible: ¿Cómo funciona?
Aunque los paneles solares fotovoltaicos ya son populares para generar electricidad, transformar esa energía en combustible ha sido un desafío. Las plantas, por otro lado, han estado utilizando la fotosíntesis durante millones de años para convertir el CO2 y el agua en oxígeno y azúcares que luego utilizan como combustible.
Un equipo de investigadores ha presentado recientemente en ACS Engineering Au un prototipo que imita este proceso, transformando CO2, agua y luz solar en metano, un combustible con mucha energía.
¿Por qué metano?
El metano es el principal componente del gas natural, un combustible lleno de energía. Aunque es un potente gas de efecto invernadero, su producción de fuentes renovables podría disminuir nuestra dependencia de los combustibles fósiles no renovables que tienen efectos negativos en el medio ambiente.
Tecnología inspirada en la naturaleza
Kazunari Domen y su equipo ya habían desarrollado un sistema que utilizaba la luz solar para dividir el agua en hidrógeno y oxígeno. Ahora, han evolucionado este proceso para incorporar el CO2, imitando más de cerca la fotosíntesis y almacenando la energía solar en forma de metano.
Para lograrlo, crearon celdas de reacción similares a los paneles solares, recubiertas con un fotocatalizador de titanato de estroncio dopado con aluminio. Estas celdas se llenaron de agua y se expusieron al sol. El agua se dividió en hidrógeno y oxígeno, y luego el hidrógeno se combinó con el CO2 para formar metano y agua, que se reintegró al proceso.
El futuro.
El equipo construyó un conjunto de estas celdas, del tamaño de una habitación pequeña, que operó sin interrupción durante tres días bajo diferentes condiciones climáticas. Aunque los resultados son prometedores, todavía es necesario mejorar la eficiencia antes de que estos sistemas sean una opción realista para la generación de energía a gran escala.
Los investigadores creen que este sistema podría adaptarse para producir precursores de plásticos y otros materiales químicos, y podría ampliarse para producir mayores cantidades de biocombustibles sostenibles.
Más información: acs.org
Icktzar dice
Cuba, y los países del tercer mundo, necesitamos esta tecnología. Sería muy interesante una colaboración de investigación entre los científicos que hicieron este avance y los nuestros.