Los paneles solares fotovoltaicos son una excelente manera de ahorrar dinero en tus facturas de electricidad y de poner nuestra granito de arena por el medio ambiente, pero hay muchos errores que se pueden cometer antes y durante la instalación. Recuerda que una instalación solar es tan resistente como su eslabón más débil y estos errores pueden ser costosos y, a veces, peligrosos.
Hoy hablamos de los errores más comunes en la instalación de placas fotolvoltaicas y cómo evitarlos.
Priorizar el precio sobre la calidad.
Dar demasiada prioridad al precio y sacrificar la calidad es un gran error. Como dijo una vez una persona sabia; «puedes pagarlo ahora o puedes pagarlo después«.
Ahora puede parecer que estamos diciendo que un presupuesto barato es siempre una mala opción, pero esto no es estrictamente cierto. También se puede obtener calidad a buen precio. La clave es investigar y asegurarse de que sabemos lo que estamos comprando.
A continuación se indican las dos grandes preocupaciones cuando se trata de recortar tu inversión:
Componentes de mala calidad.
Los componentes baratos suelen ser, por su propia naturaleza, de menor calidad que los productos más caros. Por eso, cuando compres paneles, ten en cuenta que el precio debe reflejar esta diferencia. Si no es así, ten cuidado. Los componentes de mala calidad pueden dar lugar a una serie de problemas (más de los que podemos cubrir aquí). Los más comunes son:
- Reducción del rendimiento/eficiencia.
- Aumento de los costes de mantenimiento.
- Reducción de la vida útil.
Malas prácticas en la instalación.
Si tu instalador no cuenta con la formación o la cualificación necesaria, podrías tener serios problemas en el futuro. Algunos signos que pueden sugerir una mala instalación son:
- Daños causados por el agua: los paneles mal instalados pueden aumentar el riesgo de entrada de agua y corrosión, lo que podría provocar el fallo del sistema en cuestión de años y no de décadas.
- Cableado inadecuado: si tu sistema no está bien cableado, puedes tener problemas de rendimiento y eficiencia.
- Puntos calientes – Pueden ser causados por conexiones mal soldadas, que dan lugar a una baja resistencia en la parte del panel que genera energía. Este problema puede reducir el rendimiento y la vida útil de los paneles solares.
- Peligros eléctricos – Los paneles mal instalados pueden causar una serie de peligros eléctricos que van desde los incendios hasta la electrocución.
Diseño y distribución deficientes del sistema.
Una instalación de paneles solares mal diseñada puede dar lugar a problemas de drenaje de agua, problemas de sombreado, baja eficiencia, altas cargas del inversor, etc.
Para garantizar un rendimiento óptimo, es importante que el instalador diseñe un sistema que maximice la exposición a la luz solar durante todo el día. Algunos errores de diseño habituales son:
- Instalar los paneles en una sombra parcial.
- Orientación incorrecta de los paneles en el tejado.
- No instalar suficientes paneles en una cadena para activar el inversor.
- No tener en cuenta la estructura del tejado.
Instalar un sistema demasiado pequeño o demasiado grande para tus necesidades.
Aunque técnicamente esto entra en el ámbito del diseño del sistema, es un tema de discusión tan común que pensamos que merecía una atención especial.
Si tu sistema es demasiado pequeño, simplemente significa que tendrás que depender de la electricidad de la red con más frecuencia. Si está sobredimensionado y tiene pocas posibilidades de usar ese exceso de producción ahora o en el futuro, estarás pagando más por adelantado sin ninguna razón.
A la hora de dimensionar tu sistema, un buen instalador debe tener en cuenta numerosos factores, entre ellos:
- El tamaño de su casa.
- Tu consumo medio de energía.
- Tus planes para el futuro – Dado que los paneles solares son una inversión que debería durar al menos 25 años, deberías planificar con antelación y pensar en tus necesidades futuras de energía y sus objetivos. Por ejemplo, si vas a invertir en una batería solar, si vas a comprar un vehículo eléctrico en los próximos años, si va a cambiar a electrodomésticos, si va a añadir más miembros a la familia, si vas a construir una piscina, etc. – La respuesta a estas preguntas debería influir en su proceso de decisión.
Los sistemas de energía solar de 5kW solían estar de moda, pero ahora la mayoría de los sistemas fotovoltaicos instalados tienen un tamaño mínimo de 6,6kW. Sin embargo, cada vez son más comunes los sistemas más grandes, de entre 8 y 10 kW, especialmente los que incluyen una batería de almacenamiento.
Un instalador de energía solar debería poder orientarte sobre la mejor solución para tus necesidades, pero sin duda puede hacer algunos cálculos preliminares tú mismo.
No buscar presupuestos.
En última instancia, elige una empresa que te ofrezca la mejor calidad de servicio a un precio que puedas pagar.
Busca y pide al menos tres presupuestos.
Asegúrete de que los presupuestos tienen en cuenta la instalación completa, incluido el coste de los paneles, las baterías, la mano de obra y cualquier otro gasto imprevisto.
También querrás obtener detalles sobre las garantías del sistema solar. Cuando tengas varios presupuestos, compáralos.
Busca opiniones en Internet también y presta atención a las quejas específicas que aparezcan varias veces: las experiencias y comentarios de los clientes anteriores de la empresa o instalador deberían ser un buen indicio de lo que puedes esperar.
Anónimo dice
Todo eso está muy bien. Pero cual es el coste de mantenimiento y que se les hace para ese mantenimiento.
Orangel Velásquez dice
Saludos, gracias por esta información. Una cosa es instalar y otra cosa es garantías de una instalación donde el poseer los conocimientos técnicos, financieros, ambientales, logística donde al cliente se le brinden diferentes propuestas que resguarde su inversión.