Como pionero en la industria marítima, el buque portacontenedores Maersk Halifax se ha convertido en el primer gran navío transformado para operar con un motor de doble combustible capaz de utilizar metanol. La operación de reconversión se llevó a cabo en el astillero Zhoushan Xinya, en China, durante 88 días, completándose a finales de octubre de 2024.
En 2023, Maersk transportó más de 660.000 TEU con combustibles verdes.
Innovación y compromiso con la sostenibilidad
Leonardo Sonzio, Jefe de Gestión de Flota y Tecnología en Maersk, expresó su satisfacción con el resultado del proyecto:
«Nos complace anunciar que el Maersk Halifax ha sido exitosamente transformado en un buque de doble combustible con capacidad para operar con metanol. Tras completar las pruebas de mar, el Maersk Halifax ha vuelto a operar, brindando servicio a nuestros clientes en el comercio transpacífico.»
La transformación del motor fue realizada por MAN Energy Solutions. El proyecto incluyó la sustitución de piezas clave del motor, lo que permite su funcionamiento con metanol. Además, se añadieron nuevos tanques de combustible, una sala de preparación de combustible y un sistema de suministro adecuado. Para acomodar los nuevos tanques, se extendió el casco del buque en 15 metros, alcanzando una longitud total de 368 metros. Esta modificación aumentó su capacidad de carga de aproximadamente 15.000 TEU a 15.690 TEU (unidades equivalentes a veinte pies).
Un paso hacia la descarbonización
El proyecto de reconversión del Maersk Halifax refleja el compromiso de la compañía con la sostenibilidad. Desde que Maersk estableció su objetivo climático de alcanzar emisiones netas cero para 2040, se han explorado soluciones innovadoras como esta reconversión:
«En el próximo año, extraeremos aprendizajes de esta primera conversión de un gran buque. Las reconversiones de buques existentes pueden ser una alternativa importante a la construcción de nuevos navíos en nuestra transición de combustibles fósiles a combustibles de bajas emisiones,» destacó Sonzio.
Impacto en la industria marítima
El Maersk Halifax, uno de los 11 buques de la clase Hong Kong de Maersk, partió del astillero el 4 de noviembre de 2024. Este proyecto no solo representa un avance tecnológico, sino también un importante hito en el sector del transporte marítimo hacia la adopción de tecnologías más limpias.
Maersk ya dispone de dos portacontenedores de bioetanol, pioneros en el mundo, Laura y Astrid.
Beneficios del uso de metanol como combustible
- Reducción de emisiones: El metanol permite disminuir considerablemente las emisiones de dióxido de carbono (CO2), óxidos de azufre (SOx) y partículas.
- Viabilidad económica: Al ser un combustible líquido, su manejo y almacenamiento requieren infraestructuras menos complejas en comparación con otros combustibles alternativos.
- Disponibilidad global: El metanol puede producirse a partir de fuentes renovables, como biomasa o energía eólica, lo que asegura su suministro a largo plazo.
Este proyecto no solo es un ejemplo de la capacidad de adaptación de Maersk a las exigencias ambientales actuales, sino también un modelo para otras empresas del sector. La industria marítima, responsable del 3 % de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, debe avanzar hacia soluciones sostenibles como los motores de doble combustible y el uso de metanol para cumplir con los objetivos globales de descarbonización.
Vía www.maersk.com
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