Actualizado: 05/07/2024
Con tan solo 10 años, Skye Martin de la Columbus Magnet School en Norwalk, ha demostrado que la edad no es un impedimento para la innovación. Inspirada por la cotidianidad de su baño, Skye inventó el «Pump & Twist«, una botella de champú con fondo desmontable, buscando solucionar el desperdicio de producto que queda inaccesible en los envases tradicionales.
La creatividad juvenil al servicio del reciclaje
Un desafío convertido en oportunidad
La escuela de Skye participa anualmente en una convención de inventos, donde se anima a los alumnos a crear soluciones para problemas cotidianos. La joven inventora, motivada por la petición de la escuela y su experiencia personal con los envases de champú, decidió dar vida a su idea.
De la idea a la realidad
El proceso de Skye no fue fácil. Se enfrentó a desafíos como la fuga en los primeros prototipos, pero su determinación y el apoyo de su maestra, Alyssa Malindowski, fueron clave. Tras varios intentos, logró perfeccionar su invento, demostrando que la perseverancia es fundamental en el proceso creativo.
Martin creó Pump & Twist, una botella de champú que tiene un fondo desmontable para acceder al producto restante que la función de bomba no puede alcanzar.
Reconocimiento y Futuro Prometedor
El «Pump & Twist» no solo solucionó un problema cotidiano, sino que también le valió a Skye reconocimientos a nivel escolar, estatal y nacional. Su invento fue reconocido como la mejor invención de su categoría en Connecticut y Estados Unidos, compitiendo incluso con estudiantes de otros países.
Skye Martin, con su invento, se ha convertido en un ejemplo de que con paciencia, perseverancia y confianza en uno mismo, se pueden alcanzar grandes logros. Su historia inspira a jóvenes y adultos a creer en sus ideas y trabajar duro para hacerlas realidad.
Pump & Twist fue elegido como el mejor invento de cuarto grado entre todos los estudiantes de cuarto grado de Connecticut y EE. UU., lo que le valió a Martin el cambio para competir contra estudiantes de cuarto grado de otros cuatro países.
David dice
Como han dicho en otro comentario si haces que el tubo llegue hasta la esquina del fondo lo recoges todo. Además te ahorras el coste de la rosca del fondo desmontable que seguro que encarece muchísimo el producto
Carmen dice
Cuanto comentario odioso de adultos.Luego nos quejamos de los adolescentes…por dios es una niña de 4 grado..y me parece fantástico su idea .enga ya!! Iros a otros lados a soltar vuestra baba
Paola dice
Al parecer ninguna persona de las que critica acá se tomó el tiempo de leer que es una competencia escolar de alumnos de 4to grado. Perfectamente se puede aplicar a otros productos como las cremas corporales a las que «nooooo» se les puede agregar agua.
Señores, un poco más de empatía, el mundo está muy saturado de gente odiosa que a cada solución le encuentran imperfecciones.
MANUEL ESCOBAR dice
MUY BIEN POR LA CHIQUILLA! PERO NO FALTAMOS LOS DETRATORES A ESE TIPO DE COSAS LEYENDO LOS COMENTARIOS POR EJEMPLO LUIS VAYA SI QUE ESTA SOCIEDAD ESTA ENFERMA NINGUNCHILE LES EMBONA? DEJENLA QUE SAQUE SU CREATIVIDAD.
Luis dice
Qué estupidez más grande…
Todo el mundo … Un poco de agua y listo
Ysidro dice
También va con la crema de enjuague ,detergente, CIF etc,etc
Juan dice
Solo haciendo el fondo del envase inclinado y el tubo del pulsador que llegue al punto más bajo, solucionado. Y ahorras plástico y diseño.
Joaquín del Betis dice
Pablo. Eres lo peor….no te das cuenta que es una niña pequeña con sentimientos…..??
Alberto Monsalve dice
Exacto
Pablo dice
Bien por la chica, pero yo directamente le saco la tapa al champú, le agrego un poco de agua, sacudo y listo… Es más, de esta manera hace espuma más rápido, rinde más y no queda nada de champú en el envase…