El sueño de la infancia se hace realidad cuando el depósito de agua abandonado se convierte en el hogar de una familia.
En 2012, los primos Sven y Lennart de Jong compraron un depósito de agua sin uso por 200.000 euros, con el plan de convertirla en su hogar.
Contrataron a RV Architectuur para que les ayudara a hacerlo realidad y, tras gastar aproximadamente la misma cantidad de dinero en renovaciones y otros gastos, además de trabajar duro, ahora viven en ella con sus familias.
La Torre Nieuw Lekkerland, como se llama ahora el proyecto, se construyó originalmente en 1915 por el contratista Visser & Smit y albergaba un depósito de agua para la zona.
Los primos solían pasar tiempo en la vieja torre cuando eran niños, subiendo y bajando las escaleras y jugando. Soñaban con vivir dentro, así que en cuanto se puso a la venta, la compraron.
La pareja se mudó a la torre y luego continuó renovando el interior, con más cambios para acomodar a sus crecientes familias.
Una de las preocupaciones era asegurarse de que el espacio, relativamente pequeño, de 9 m de diámetro, no resultara claustrofóbico, por lo que se añadieron generosas cristaleras con preciosas vistas al exterior.
El interior original de tres plantas también se dividió en seis para acomodar a las dos familias.
La distribución interior está organizada en dos zonas de estar y de dormir distintas -una para cada familia- con espacio para dormir los niños más pequeños, además de una sala de juegos. Los primos también planean instalar una piscina cubierta en la antigua zona de la torre, que será un buen complemento una vez terminada.
La renovación de los depósitos de agua es algo tan habitual en los Países Bajos que la Fundación Holandesa de Depósitos de Agua organiza un premio anual para reconocer los mejores ejemplos. La Transformación de la Torre de Nieuw Lekkerland fue la ganadora en 2020.
La base de la exitosa transformación está formada por el potente diseño de [RV Architectuur] Ruud Visser y Fumi Hoshino. Los enormes ventanales de suelo a techo que dan al río De Lek y al paisaje de los pólderes holandeses contribuyen a la calidad de los espacios interiores y encajan perfectamente con el aspecto robusto del depósito de agua. Es reconfortante ver que una transformación tan inspiradora puede realizarse con un presupuesto reducido.
Comunicado de los propietarios.
Más información: www.rvarchitectuur.nl
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