Actualizado: 15/12/2021
Una película para aplicarse sobre el vidrio, capaz de modular el paso del calor solar. El objetivo es crear un ambiente interior agradable incluso cuando el sol está al máximo.
La climatización del hogar tiene ahora un nuevo aliado cero energía. Es una película para cristales creada en la Universidad Tecnológica de Chalmers, Suecia, que puede regular el paso del calor en los días soleados de verano.
«El objetivo – explica el químico Kasper Moth-Poulsen, responsable del proyecto de investigación – es crear un ambiente interior agradable incluso cuando el sol está al máximo, sin consumir energía ni tener que cerrar las persianas.»
La climatización doméstica es uno de los grandes retos de la transición energética y de la lucha contra el cambio climático.
Según datos de la Agencia Internacional de la Energía, en los próximos 30 años el creciente uso de aire acondicionado y ventiladores, bajo la presión del aumento de las temperaturas mundiales, representará uno de los principales impulsores de la demanda mundial de electricidad.
Y si el sistema energético no ha dado el espacio adecuado a las fuentes renovables, la necesidad de climatizar se traducirá necesariamente en un aumento de las emisiones.
Encontrar soluciones pasivas, que no requieren energía para funcionar, es uno de los caminos más populares hoy en día junto con el aumento de la eficiencia de los electrodomésticos tradicionales. Esta línea de investigación también incluye el estudio de Moth-Poulsen y sus colegas, inventores de un método que atrapa el calor del sol y lo distribuye uniformemente durante un período de tiempo más largo. «Por qué no aprovechar al máximo la energía que obtenemos de forma gratuita en lugar de intentar combatirla«, añade el químico.
El grupo de científicos creó un sistema llamado MOlecular Solar Thermal (MOST) que incorpora un compuesto orgánico que puede almacenar energía térmica alterando sus enlaces químicos.
Cuando el sol sale por la mañana y sus rayos golpean el material, gran parte de la energía solar es absorbida por la molécula. Cuando los rayos del sol ya no golpean la película, la molécula vuelve a su forma anterior, liberando la energía almacenada.
Esta transformación permite realizar un sistema de almacenamiento térmico pasivo capaz de ayudar a la climatización doméstica. Los científicos están trabajando ahora tanto para bajar el precio del compuesto y para aumentar su concentración dentro de la película.
Se cree que estos objetivos deben alcanzarse en un plazo relativamente corto, a fin de tener un producto listo para la venta en el menor tiempo posible. La investigación se describe en un artículo publicado en la revista Advanced Science.
Deja una respuesta