«El mejor sistema para limpiar prácticamente cualquier cosa». Es como sus creadores definen este nuevo invento, un aparato del tamaño de un teléfono móvil que pone la tecnología de ultrasonido, hasta ahora empleada fundamentalmente en aplicaciones médicas e industriales, al servicio de la limpieza de ropa, accesorios para bebés, joyas, productos de higiene personal o frutas y verduras, entre otros. Además de ser multiusos, Sonic Soak es letal, aseguran.
«La última evolución para el lavado que utiliza tecnología de ultrasonido para lograr una limpieza más profunda, además de ahorro de tiempo, de agua y de energía», explican desde la empresa impulsora del sistema, que busca con una campaña de crowdfunding apoyos para poner en circulación la tercera generación del invento. Pero, ¿cómo funciona y qué aporta realmente?
Empezando por el funcionamiento, este sistema limpia a través de la tecnología de ultrasonido. En el agua, esta genera unas ondas muy poderosas que, a través de un proceso conocido como cavitación, crea unas burbujas que son las que garantizan la limpieza. Tanto es así que, según los creadores, este aparato permite limpiar a un nivel microscópico, desintegrando la suciedad y las bacterias.
Por ello, los promotores recomiendan su uso para limpiar «virtualmente lo que sea». Una posibilidad sería la fruta y verdura para su consumo. Se estima que un lavado manual al uso de los alimentos solo acaba con alrededor del 80% de la suciedad y los restos de pesticida y químicos presentes en los mismos. La fórmula y, con ella, las posibilidades para utilizar Sonic Soak, se replican en productos de limpieza personal, que figuran entre las principales fuentes de infección; accesorios para bebés, utensilios de cocina, además de gafas, llaves o joyas.
Otro potencial uso de este invento, según sus creadores, sería la limpieza de la ropa de una forma mucho más eficiente en consumo de energía y recursos que la lavadora. Sonic Soak, defienden, es más sostenible que estos electrodomésticos que, por lavado, consumen al menos 40 litros de agua, además de representar alrededor del 11% del consumo de energía de un hogar. Frente a ello, Sonic Soak emplea el 10% de la energía y el 2% del agua que necesita una lavadora convencional.
Además, interrogan los creadores del aparato, «¿tu lavadora puede limpiar manzanas? Lo dudamos». Con esto, ponen el acento en la versatilidad de la solución en la que han trabajado durante los últimos dos años. La idea surgió, sencillamente, porque los creadores son viajeros habituales que, por ello, en muchas ocasiones no lo tienen fácil para lavar la ropa.
Ese es uno de los perfiles a los que se dirige estas innovación a la que sus impulsores ven ventajas para prácticamente cualquiera por su eficacia, su eficiencia, su tamaño y su facilidad de uso. Y es que, para limpiar por ultrasonido con Sonic Soak, solo es necesario llenar un recipiente con agua, añadir jabón, conectar el sistema y dejar que actúe. Es, opinan sus promotores, «la herramienta definitiva para la limpieza».
Deja una respuesta