Actualizado: 30/09/2022
Quien tenga varios palés de madera y algo de espacio en su jardín o terraza, puede darles un nuevo uso que evite que se desaproveche la madera y que, además, permita dotarse de un cobertizo que se puede utilizar para múltiples cosas. A continuación te explicamos cómo construir un cobertizo con pales reutilizados.
Palés más adecuados.
Lo primero a lo que habrá que prestar atención es a los palés. Aunque el número de los que serán necesarios lo determinará el espacio disponible, lo que sí es importante es que todos sean del mismo tamaño y que, a ser posible, tengan forma cuadrada. Con esto, evitarás tener que aplicar cortes en una madera que destaca por su especial dureza.
Crear la estructura del cobertizo.
Para construir cada pared, une tres palés con tornillos de arandela. Cuando esté todo bien anclado, necesitarás seguramente otro nivel de altura. Para ello, tendrás que fijar otros tres palés en horizontal por encima de la primera línea. Atornilla bien todas las partes. No olvides dejar un área sin cubrir para el acceso al cobertizo.
Fabricar el tejado.
Para el techo necesitarás varios tablones de madera. El tamaño dependerá del de tus palés y de cuántos hayas utilizado. En todo caso, asegúrate de que sean lo suficientemente largos como para llegar de extremo a extremo, con una pequeña inclinación desde la parte delantera hacia la trasera.
Para crear esta pendiente, tendrás que arrancar fijando en los extremos de la parte delantera dos tablones pequeños que la eleven en altura respecto a la parte posterior. Sobre ellos, fija en horizontal, en todo el ancho de la fachada, un tablón. Repite la operación en la parte trasera, justo sobre los palés.
Ahora tendrás que tender desde la parte delantera hasta la trasera otros cuatro tablones (dos sobre las paredes laterales y otros tantos en la zona central), que tendrás que atornillar, pero sobre su extremo más fino, tal y como puedes ver en la imagen.
Sobre ese entramado de tablones, fija otra tanda, en este caso de siete de la fachada a la parte trasera. A diferencia de la línea que va justo por debajo, coloca estos tablones sobre su parte más ancha.
Una vez toda la estructura esté bien anclada, podrás techar el cobertizo. Para ello, puedes optar por una cubierta de chapa galvanizada que tendrás que anclar con correas como esta o semejantes.
Revestimiento exterior y pintura.
A continuación, tendrás que cubrir las paredes fabricadas con palés. Una buena opción son los paneles de revestimiento. Sobre estos se procederá a aplicar una buena capa de pintura del color y tipo que elijas. Para este proyecto se escogió pintura gris con base de aceite. Aplica tantas manos como consideres.
Asegurar el cobertizo.
Este paso puedes darlo antes de instalar el tejado o en este punto, en el que puede resultar algo más costoso. Consiste básicamente en asegurar el cobertizo al suelo mediante pilares de hormigón en cada una de sus esquinas. En estas estructuras, introduce una barra metálica como ves en la imagen y únela bien a la estructura.
Con esto, la construcción de tu cobertizo con madera reciclada habrá terminado y ya podrás empezar a disfrutar de él y a darle el uso que decidas. Además, puedes ir aplicando mejoras a tu diseño, como por ejemplo la incorporación de una pequeña zona de almacenamiento cubierta en alguno de los laterales, o cualquier otra opción que se te ocurra y que te permita extender la vida de los viejos palés.
Luis Enrique dice
Excelente muy buena para uno que construye