Actualizado: 05/07/2024
En un gran paso para la gestión de desechos nucleares, un ex científico de CERN, ahora trabajando en la empresa privada de fisión nuclear Transmutex, ha desarrollado un enfoque revolucionario que podría reducir la radiactividad de los desechos nucleares en hasta un 80%. Esta tecnología, desarrollada en Suiza, ha sido rigurosamente revisada por Nagra, la agencia nacional suiza de gestión de desechos nucleares, que ha confirmado su potencial para una reducción significativa de la radiactividad.
Tecnología innovadora para la reducción eficiente de desechos nucleares de larga duración
La seguridad de los reactores de fisión nuclear ha sido tradicionalmente el centro de atención. Sin embargo, la seguridad a largo plazo del combustible gastado demanda una mayor atención, ya que este permanece radiactivo durante cientos de miles de años después de haber sido utilizado. Este desafío ha motivado a Transmutex a explorar soluciones innovadoras para mitigar el impacto ambiental de los desechos nucleares.
La Solución de Transmutex
Transmutex utiliza la transmutación para convertir elementos en sus isótopos o incluso en elementos completamente diferentes. Este proceso innovador, que recuerda la búsqueda de los alquimistas para convertir metales básicos en oro, ha sido realizado con éxito por antiguos científicos del CERN. Utilizando un acelerador de partículas, han demostrado la capacidad de transmutar un elemento ligeramente radiactivo como el torio en un isótopo de uranio.
Funcionamiento del Acelerador de Partículas
El acelerador, conectado a una planta de fisión nuclear, permite el procesamiento inmediato del uranio recién generado. A diferencia del uranio tradicional utilizado en las plantas de energía nuclear, este uranio no produce desechos altamente radiactivos. Esta tecnología es el cerebro de Carlo Rubbia, ex director general del laboratorio de física en CERN.
Desafíos y Viabilidad
A pesar de los avances, existen obstáculos significativos. Mientras que Rubbia tenía acceso a un acelerador de partículas en su antiguo lugar de trabajo, las plantas de energía nuclear no disponen de esta infraestructura. Construir un acelerador de partículas cerca de cada planta puede ser muy costoso, considerando que CERN gastó cerca de 4.6 mil millones de euros para construir el Gran Colisionador de Hadrones.
Oposición y Futuro de la Tecnología Nuclear
La resistencia a la tecnología nuclear representa un desafío considerable. Tanto Alemania como Suiza tienen planes para eliminar progresivamente sus plantas de energía nuclear. Sin embargo, si el gobierno está abierto a ello, la tecnología de Transmutex podría ofrecer una solución viable.
La empresa ha asegurado financiamiento privado y ha recibido una evaluación positiva de Nagra. Según Nagra, la tecnología de Transmutex tiene el potencial de reducir el volumen de desechos nucleares en un 80% y disminuir su vida radiactiva a menos de 500 años. Además, podría aplicarse al 99% de los desechos nucleares existentes. En términos de seguridad, una instalación nuclear alimentada por Transmutex podría apagarse en solo dos milisegundos, estableciendo un nuevo estándar en tecnología de fisión.
La tecnología desarrollada por Transmutex representa un avance significativo en la gestión de desechos nucleares, ofreciendo una solución que no solo reduce la radiactividad de los desechos, sino que también establece nuevos estándares de seguridad en la industria nuclear. A medida que el mundo busca soluciones sostenibles y seguras para el manejo de la energía nuclear, innovaciones como esta podrían jugar un papel crucial en el futuro de la energía limpia y sostenible.
Más información: ggba.swiss
Ja More dice
Las termoeléctrica con fisión núclear, puede seguir siendo viable si los desechos se pueden eliminar así.
Rodrigo Gonzalez dice
Pierden su tiempo o simplemente atraren dinero, esa tecnología ya no es necesaria, ya está obsoleta, la mejor forma de procesar los desechos nucleares es convertirlos de nuevo en combustible nuclear. El problema para Suiza, y para occidente en general, es que la tecnología que permite convertir uranio de desecho de nuevo en combustible es de desarrollo ruso, es poco probable que Rusia abra el acceso a los países que le imponen sanciones.